Boutonnières para el novio

Cuando hablamos de las flores para la boda, se nos suele venir a la cabeza el ramo de la novia, la decoración del lugar de la ceremonia, los centros de mesa, el coche... Pero, ¿y el novio? Los boutonnières quedan en el olvido hasta que el propio florista nos lo recuerda. En el post hoy vamos a hablar de ellos. La entrada de esta semana va dedicada a vosotros, los novios.

El atuendo del novio y del padrino se caracteriza por la sobriedad y elegancia. Los accesorios y complementos son los que darán ese toque diferente al look. Ahí es donde entran en juego los boutonnières. Estos serán una oportunidad de aportar color y personalidad al traje de forma muy sencilla.

Para los que no lo sepáis, los boutonnières son ese adorno que se coloca en el ojal de la chaqueta y suele ser una flor. Y, dejando de banda los gustos personales, nunca está de más saber un poco sobre ellos y algunos consejos de cómo llevarlos... ¡Empezamos!

¿CÓMO LLEVARLOS?

     - A JUEGO CON LA NOVIA: Que haya conexión entre todos los detalles de la boda es muy importante puesto que esto dará un efecto de continuidad. En estos casos, lo mejor es optar por las mismas flores o parecidas a las que ella lleve en su ramo o en su corona. Si no cogemos los mismos tipos, lo ideal es escoger colores similares a los suyos y que combinen a la perfección con el estilo de su bouquet.

     - PADRES, PADRINOS Y TESTIGOS: La costumbre anglosajona de que los testigos también lleven flor en el ojal se está imponiendo con fuerza en nuestro entorno. Cada vez es más común ver a todo el grupo de chicos con su boutonnière. ¡Están máaas guapos!
En este caso hay varias opciones: todos los prendidos iguales y el del novio de mayor tamaño; que los testigos lleven la misma flor y que el novio lleve otra; todos distintos pero con cierta vinculación entre unos y otros; cada uno diferente al otro (se suele ver más en las bodas informales, al aire libre y/o rústicas)... Normalmente suelen ser flores que lleva la novia en su ramo.

     - CLÁSICO: Si tu boda se caracteriza por la elegancia, la sofisticación y la sencillez, las rosas serán vuestras aliadas perfectas a la hora de elegir los prendidos. Si optamos por ir a lo clásico, seguiremos a rajatabla los colores del ramo de la novia (que seguramente serán el blanco y/o el rosa palo).
Si preferimos otra flor, se puede escoger cualquiera que lleve ella. Lo ideal será elegir un tipo que tenga un tamaño medio y que sea vistosa para que llame la atención. Se debe saber diferenciar entre la sencillez y la simplicidad.

     - LOS BOUTONNIÈRES NO SON SOLO FLORES: Añadidles plumas, trozos de tela, un pequeño detalle especial, hacedlos vosotros mismos, cambiadlos por completo... Lo importante es que sea algo con lo que vosotros os sentís cómodos. Elegid algún elemento que os identifique y no dudéis en ponéroslo.
Actualmente hay multitud de opciones entre las que escoger, entonces ¿por qué ir siempre a lo típico? Si os soy sincera, no son mis favoritos, pero a veces vale la pena salirse de lo común. ¿Vosotros os atreveríais?

A continuación os dejo algunos de los boutonnières que he visto y más me han gustado...

Hasta aquí la entrada de hoy! Espero que os haya servido de inspiración y cojáis ideas. Os espero muy pronto con el nuevo post, hasta entonces, ¡sed felices! :)

Fuente Imagen: Pinterest.